Impacto al rezago y cobertura
En el 2015 Corazón de Niño inicia una serie de estrategias para llevar la atención al mayor número de menores de nuestro estado; durante el 2016 se incrementaron dichos esfuerzos para detectar y diagnosticar, logrando así mostrar que existía una atención tardía en este tema de salud. Posteriormente en el 2018 logramos llegar al pico más alto del promedio de edad de atención, es decir un niño lograba tener un tratamiento en Baja California Sur a una edad promedio de 8.12 años y en el 2019 logramos una disminución en el indicador del promedio de edad a 7.86, lo que confirma la efectividad de las estrategias aplicadas.
Hemos resuelto el 40% de pacientes menores de edad que necesitan tratamiento cada año en nuestro estado. El impacto social es enorme, ya que se acerca a la cobertura del sector salud estimada en 50% para todo el país hasta 2019. En México, la mitad de las y los niños que padecen de una cardiopatía y requieren de un procedimiento invasivo para solucionarla, deben de pasar primero por listas de espera de por lo menos 2 años. Al llegar al tratamiento, es frecuente que se hayan desarrollado daños colaterales a la cardiopatía o que sea demasiado tarde.